Archivo Barboza Grasa ®

PINTORES DE LA LUZ EN ESPAÑA

PINTORES DE LA LUZ EN ESPAÑA 
Con motivo de la Exposición en el Palacio de Sástago  de Zaragoza sobre la Pintura española de los siglos XIX y XX, perteneciente a la Colección Gerstenmaier donde se encuentran los mejores paisajistas españoles de estos siglos desde Genaro Pérez Villaamil , Carlos de Haes, Martín Rico,  Fortuny,…. hasta Gutiérrez Solana y Benjamín Palencia, me he puesto a meditar sobre los pintores paisajistas y el paisaje en el arte.
Hay artistas que tienen una fina sensibilidad para captar la luz y el color de la naturaleza. Fue Leonardo da Vinci con su teoría sobre el color y la perspectiva aérea sfumato, quien incorpora el paisaje junto al ser humano. El mayor ejemplo de esta  dualidad es La Gioconda. En el Renacimiento Botticelli, Rafael, Ticiano, utilizan la naturaleza como telón de fondo para contarnos historias de vírgenes,  vestales,  musas danzantes, bacanales y todo logrando un juego de luz y color.  La Contrarreforma y el tenebrismo vuelven al oscuro de las estancias y los talleres, Caravaggio utiliza la luz que entra por las ventanas iluminando las figuras  que juegan a las cartas o a las vírgenes con niños. El Greco se aprovecha de este manierismo  y de esta penumbra para que la luz explote dentro del cuadro y es Velázquez  quien vuelve al color y a la luz exterior utilizando la perspectiva aérea leonardesca y nos deja dos pequeños cuadros pintados en la Villa Médicis de Roma en donde la luz es protagonista adelantándose a lo que iban a buscar los pintores del siglo XIX.  Rembrandt se mueve entre la  luz interior y sus paisajes exteriores, su   Atardecer sobre un puente es una obra maestra de cómo captar el ultimo destello de la tarde antes que llegue la noche.  Los holandeses hacen del paisaje un tema individual con vida propia toda una galería de su tierra en el siglo XVII.  En Venecia en el siglo XVIII se crea un grupo de paisajistas llamados vedutistas,en los que la luz veneciana recorre con toda luminosidad todos los rincones de esta gran ciudad, entre ellos se encuentran Canaletto, Bellotto, Guardi, el primer impresionista. Goya es todo luz, en sus tapices de majos y majas de Madrid el paisaje le sirve de fondo para que el pueblo entre en el tapiz  y que la gente de Madrid disfrute de su luz  junto al rio Manzanares donde se encuentra la ermita que pintó al fresco donde ese mismo pueblo quedó reflejado aprovechando el milagro de San Antonio de Padua que hace hablar a un difunto.
Constable y  Turner, en Inglaterra comienzan a preocuparse por el efecto de la luz sobre los elementos naturales, no solo  buscando sensaciones lumínicas sino que quieren que sintamos la humedad de la lluvia sobre las hojas.  Listón que recogen los pintores dela Escuela de Barbizón donde Corot,  Millet, Diaz de la Peña, – de origen español y maestro de Renoir, -Monticelli, -admirado por Van Gogh,- Rousseau……dan las claves y son los maestros de los futuros impresionistas que llevan hasta las últimas consecuencias el estudio de la luz y el color,  dividiendo en pequeñas pinceladas de colores complementarios para que el ojo recomponga la forma y el conjunto a la distancia adquiera las tonalidades de las  distintas horas del día y en lugares tan distantes como  Londres o el Mediterráneo.  Gauguin, Seurat y Van Gogh reaccionan contra esta pintura y crean el Impresionismo sintético el puntillismo y la búsqueda de la luz interior en el paisaje que quema Van Gogh. Cezanne lo geometriza y lo divide en pinceladas poniendo las bases  para que un español en París cree el Cubismo.  Después de Picasso nada será igual en la Pintura.
En España, muy ligada la pintura a la tradición católica y a los cuadros de historia, el paisajismo no toma cuerpo académico hasta la publicación de una Real Orden  con fecha 14 de mayo de 1844, y se crea la Cátedra  de Paisaje en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, siendo su primer profesor el pintor romántico Genaro Pérez Villaamil. El gran paisajista que desarrolló lo mejor de su obra en Venecia, Martín Rico fue discípulo de Villaamil y en sus recuerdos habla de sus enseñanzas, les hacía copiar paisajes  de litografías a lápiz y tinta china sepia, que luego el se encargaba de ponerles color a su capricho con una intención romántica, no salían al campo a pitar.
El paisaje para Villaamil y Lucas era un paisaje romántico e idealizado. Pero no es hasta la llegada como profesor a dicha Cátedra de Carlos de Haes, un español de origen belga, que en 1857 toma posesión y comienza  el verdadero despegue en el territorio español de pintar al aire libre. Primero con una estética de la Escuela de Barbizón  que frecuentó y fue un gran pintor en esta corriente artística.   Los grandes paisajistas españoles de fin de siglo fueron sus alumnos como Aureliano de Beruete, Darío de Regoyos, Sainz, Agustín Riancho, Jaime Morera,….Fue un gran pedagogo de amable trato y hacía copiar a sus alumnos directamente del natural por lo que promocionaba el  excursionismo artístico por toda España.  Su alumno Beruete describe sus enseñanzas de la siguiente manera: ………de una enseñanza sabia,  basada en el estudio del natural, puesta al servicio de una inteligencia clara y despreocupada, todo ello en contraposición de los métodos  inspirados en los amaneramientos de escuela y en convencionalismos tan en uso entonces en España.  El paisaje de Carlos de Haes  de cuando estuvo por Bélgica y Barbizón,   tiene todas las claves y el color de esta escuela. En España el color se vuelve rico y lleno de sol, y cuando pinta en Aragón hace un paisaje a plena luz se siente la sequedad del ambiente y el oasis que es el Monasterio de Piedra donde pasaba veranos.  Los Picos de Europa le dieron una fuerza y suavidad del color, donde podía estudiar todas las gradaciones en las montañas, como lo explicaba Leonardo.
Dos de sus alumnos Beruete y Regoyos, son los que dan un paso mas que su maestro. Regoyos  termina de formarse en Holanda y en París,  trayendo a España el Impresionismo y el Puntillismo  y recorre los caminos y los pueblos  de España dejando constancia de sus conocimientos pictóricos.  Beruete es el paisajista mas intelectual español, sus obras tiene la solidez de la obra meditada. En un principio se une a la estética de su maestro, pero sin saltos bruscos  llega a un impresionismo muy personal y bello de una  gran calidad estética, es un placer mirar su pintura.  Cataluña mas en la orbita modernista crea una escuela de paisajistas de gran repercusión en España, entre ellos  se encuentran  Santiago Rusiñol, Casas  y Joaquín Mir,  y anterior a ellos, la Escuela de Olot,  en al que destaca Vayreda. Deambulando por esta pintura se  encuentra Picasso joven en Barcelona, que pinta paisajes  con su propia personalidad.  En Valencia la figura de  Joaquín Sorolla y el sorollismo  invaden  el ambiente artístico. Este pintor formado en Roma y con una forma de ver la pintura folclórica y literariamente al unirse con Beruete y viajar a París,   a principio de siglo, cambia de registro y se vuelve luminoso y trabaja un impresionismo muy personal captando la luz del mar  Mediterráneo de una forma única.
En Aragón tierra de Goya, se han dado grandes pintores en la época de Haes,  como Francisco Pradilla o Barbasán,  que realizó su obra en Italia.  Juan José Gárate  dedica todas sus fuerzas pictóricas a incluir en el paisaje aragonés a su gente y sus costumbres, como la pintura que presentamos inédita en este blog,  Las segadoras de 1919, que resume un poco su estética tomando como tema a la mujer labradora que ayuda al hombre en la recolección del trigo, bajo el sol el verano aragonés, que se refleja en las mieses.  Se siente el aire seco y el sol inunda todo el paisaje.  El estudioso de Garate José Antonio del Val, de Albalate del Arzobispo, como el pintor, está catalogando toda su obra.
España, tierra de pintores,  tiene tres artistas adelantados a este movimiento paisajistas  y de pintar al aire libre, como son Velázquez, Goya y Díaz de La Peña, y  fue Carlos de Haes quien impulsó este movimiento de gran belleza. El artista cruza el océano del arte en una pequeña barca, algunos se ahogan en el intento, otros logran llegar a la otra orilla,  pero todos tienen la intención de crear belleza para placer de la Humanidad.  

Carlos Barboza Vargas 

http://barbozagrasa.blogspot.com.es/2013/06/pintores-impresionistas-aragoneses-del.html