Archivo Barboza Grasa ®

EL MUSEO EGIPCIO Y LA PINACOTECA SABAUDA Y LEGNANINO EN TORINO



Torino o Turín, celebra el 150 aniversario de el primer Parlamento celebrado en el Palacio Carignano después de haberse independizado de Austria en 1861, teniendo como protagonistas principales de este Resurgimiento a Vittorio Emanuele II, primer Rey de Italia, a Garibaldi, al Conde Cavour a Camilo Benzo, a Mazzini, y a los ciudadanos de Torino. Para celebrar el acontecimiento la ciudad se ha engalanado con múltiples exposiciones de arte, y entre ellas, la del Palacio Carignano, construido de ladrillos rojos por el arquitecto Guarino Guarini, entre 1679-85, es una de las obras maestras del arte barroco turinés, y fue la residencia donde nacieron Carlo Alberto y su hijo Vittorio Emanuele II.
Dentro de sus paredes y techos se encuentran pinturas murales de Stefano Maria Legnani, llamado el Legnanino, nacido en Milán en 1661, y muerto en 1713. Es allí donde se celebra una exposición de su pintura sobre lienzo, acompañado de sus maestros, como son su padre, Giovanni, y Carlo Maratta, y de sus compañeros, como Carlo Cignani, con el que viaja a Bolonia a aprender el arte de pintar, y de los pintores que le influenciaron en Génova como Gregorio Ferrari. Se exponen obras también de Lanzani, Pozzo, Taricco, …En la exposición se puede estudiar la evolución de este pintor muralista influenciado por la escuela boloñesa, sus estudios en Roma con Maratta, y afianzando su maestría de muralista en Génova, que luego desarrollará en los muros y techos del Palacio Carignano con una intención, ya no barroca sino utilizando una paleta clara mas unida al estilo rococó del próximo siglo.
A un costado de la plaza Carignano se encuentra el edificio de la Academia de las Ciencias que alberga el Museo Egipcio y la Galeria Sabauda, con colección del arte de los Saboya. En las dos primeras plantas se encuentra uno de los principales museos de Arte Egipcio del mundo, el segundo después de el de El Cairo, dedicado exclusivamente a este periodo artístico nacido gracias a las aguas del Nilo, del Mediterráneo y a sus creativos habitantes. En un pequeño trayecto, pasamos del siglo XVII a 3000 años antes de Cristo.
En la presentación de un folleto que entregan a la entrada dice lo siguiente: El Museo Egipcio más antiguo del mundo. Se fundó en 1824, con la adquisición por parte de Carlo Felix de Cerdeña de una amplia colección reunida por Bernardino Drovetti que fue Cónsul de Francia en Egipto al servicio de Napoleón Bonaparte. La colección Drovetti comprendía 5268 objetos de gran calidad y se guardó con otras antigüedades egipcias adquiridas anteriormente, en el palacete del siglo XVII que hoy en día sigue acogiendo el Museo…..
Sumergirse de pronto en unas creaciones artísticas tan antiguas produce una gran emoción al enfrentarse a tan misterioso mundo, el culto a los muertos y la necesidad de prolongar su existencia a través del arte, convirtiendo sus tumbas en una segunda casa. La religión totémica que hace de sus dioses, mitad hombre mitad animales, se presta a que los artistas utilicen su capacidad de síntesis para comunicar su emoción estética y trasladarnos el misterio de la vida y de la naturaleza. El culto a los muertos queda expuesto en sus vitrinas, con cadáveres momificados, lo que hace que sus almas sigan vagando, y esto me recuerda a Ulises cuando baja al Hades y cuenta lo siguiente:….. Acudió la primera el alma de nuestro camarada Elpenor, pues aún no había penetrado en la tierra de vastas sendas, ya que dejamos nosotros su cadáver en el patio de Circe, sin llantos e insepulto……¿ Cómo has llegado Elpenor, a estas densas tinieblas?…..Se me partió el cuello por las vertebras y mi alma descendió al Hades….allí, luego, señor, te ruego que te acuerdes de mi. No me dejes atrás al zarpar, sin llantos ni tumbas….. Canto XI de la Odisea. Estos cadáveres están sin llanto ni tumba en el Museo.
En la tercera planta del edificio se encuentra una de las mejores colecciones de pintura de Italia, la Colección Sabauda o Saboya. Estas obras fueron expuestas en 1832 por Carlos Alberto de Saboya y se componía de 365 pinturas provenientes del Palacio Real y de otras residencias, fue donada al Estado italiano en 1860 y se encuentra en su actual sitio desde 1875. Esta pinacoteca está compuesta actualmente por unas 600 obras de pintores que van desde la Edad Media al siglo XIX, entre los que se encuentran nombres como: Fray Angélico, Pollaiolo, Boticelli, Ticiano, Veronés, Tintoretto, Tiépolo, Belloto, Carracci, Guercino, Ricci, Reni, Broncino, Memling, Van Eyck, Brueghel, Rubens, Van Dick, Rembrandt, Vignee Lebrun, y muchos otros. Es un buen final después de visitar las obras de los egipcios.


Carlos Barboza Vargas